domingo, 24 de febrero de 2008

El Mate


Desde que llegué a Buenos Aires, he escuchado mil recomendaciones... debes aprender a bailar tango, tienes que comer carne, ir al teatro, probar los helados artesanales y tomar el mate. En varias oportunidades, en Pringles 36, propiciábamos la mateada. Comprábamos el mate, citábamos a los amigos, teníamos todo y nunca se sucedía el momento. Siempre pasaba algo.
Ayer, sin buscarlo, sin preparativo, sin saberlo... sucedió. Ayer conocí el mate, lo que representa, cual era su secreto. En una casa humilde, con un grupo de mujeres encantadoras, todos sentados en la cocina, hablando de nuestras vidas y sueños; Xavi y yo tomamos mate.
No es una hierba, no es un té, no es un diurético. Son todas esas cosas y más. Es el compartir, el saber, la amistad, la picardía, la tristeza y la alegría. El mate es un buen amigo y tan sólo en un pequeño rincón de Buenos Aires, en Pringles 36 ya tengo seis. Que vendrá después???... No lo sé, por ahora brindo...

Salud!

Helen

2 comentarios:

Unknown dijo...

Yo también brindo, por SIFO!!!

Unknown dijo...

si..!
gracias a la comandante Lourdes
SALUD