Cámara.....Acción!!

Vuelve a ser viernes, quizás salimos a tomar algo, quizás no, pero hoy no es demasiado relevante, a diferencia del resto de viernes des de que pisamos la ciudad, hemos puesto punto final a las clases teóricas del curso. 6 profesores distintos, con sus respectivas dotes docentes, métodos, tonos, letras, consejos, maneras de relacionarse, formas de interesarse, de divagar...y la mayoría con problemas técnicos con el DVD. Cada uno con su estilo característico pero todos con el 100% de sus energías puestas en transmitir el máximo de conocimiento en el mínimo tiempo. A ellos, Malena, Cristian, Dario, Djamila, Miguel y Mario, y de parte de todos, MUCHAS GRACIAS!!

Muchas mañanas llegando algo tarde, muchos cafés y refrescos en el Maxikiosco de la esquina, muchos folios de libreta llenos de conceptos y nombres de maestros del cine, muchos y muy buenos documentales, otros no tanto, muchas "escapaditas" de clase (y no miro a nadie Laila), bastantes cabezaditas y ojos cerrados, pero ante todo un ambiente de trabajo de lo más lindo.

A partir de ahora las sillas negras y algo incómodas de la escuela van a dar paso a largas jornadas de rodaje por las calles de Buenos Aires, la práctica entra en nuestras vidas. Sin ir más lejos hoy uno de los grupos ya ha empezado la aventura entre cámaras, micrófonos corbateros, cañas, audífonos...Y la semana que viene todos los grupos nos ponemos manos a la obra. Suerte compañeros/as!!

Xavi

La autopista del Sol.

Quizás es demasiado pronto pensar en...que pasará cuando ésto acabe; pero pienso que es un defecto del ser humano, que su mente vaya un paso por delante del presente; aunque creo que lo que más nos hace pensar en la incertidumbre del futuro cercano, son las pocas ganas que hay de tener que partir.

Al principio parecía muy lejano el estar aquí, pero sin darnos cuenta,y aunque los días sean de 48 horas, en los que todo puede pasar, menos la rutina; se acerca el ecuador del viaje. Hablar y planear la "locura" de La autopista del sol, no solo es una vía de escape para apaliar momentaneamente nuestros incertidumbres; es el proyecto, quizás loco, quizas arriesgado, quizás útópico, pero la llama que nos hace ilusionarnos con nuestro sueño, vivir del documental, y mantener viva la aventura que ha cruzado nuestras vidas.

"Piensa que el cielo se abre bajo tus pies"

Lourdes

El Mate

Desde que llegué a Buenos Aires, he escuchado mil recomendaciones... debes aprender a bailar tango, tienes que comer carne, ir al teatro, probar los helados artesanales y tomar el mate. En varias oportunidades, en Pringles 36, propiciábamos la mateada. Comprábamos el mate, citábamos a los amigos, teníamos todo y nunca se sucedía el momento. Siempre pasaba algo.

Ayer, sin buscarlo, sin preparativo, sin saberlo... sucedió. Ayer conocí el mate, lo que representa, cual era su secreto. En una casa humilde, con un grupo de mujeres encantadoras, todos sentados en la cocina, hablando de nuestras vidas y sueños; Xavi y yo tomamos mate.

No es una hierba, no es un té, no es un diurético. Son todas esas cosas y más. Es el compartir, el saber, la amistad, la picardía, la tristeza y la alegría. El mate es un buen amigo y tan sólo en un pequeño rincón de Buenos Aires, en Pringles 36 ya tengo seis. Que vendrá después???... No lo sé, por ahora brindo...

Salud!

Helen

Eclipse

Así transcurren nuestras noches en Pringles 36.

Talía

Jaime

"Lo de Jaime" podriamos decir que fue amor a primera vista y creo sinceramente hablar por todos nosotros. No es ni un profesor magistral de la escuela de cine ni un personaje destacado en la vida de la ciudad. Se levanta cada día antes de las 6 y hace sus cosas previo a aparecer por el trabajo, donde no es el jefe pero sí el alma. Es un hombre sencillo que disfruta haciendo la vida más cómoda a los demás y que entre las mesas del bar se mueve como pez en el agua, a pesar de sus 91 años. Amable, cariñoso, alegre, bromista, coqueto, atento, desde el primer día se nos metió en el bolsillo y día sí día también, almorzamos en su local, atraidos por su calidad humana su dulzura, su humildad y su don de gentes.

Esta semana lo conocimos en otro ámbito más personal, su casa. Nos invitó a todos a tomar café. Al llegar, nos abrió la puerta con la mejor de sus sonrisas y vestido de gala. En la mesa todo preparado para una tarde de anécdotas, risas y confesiones. Los que pudimos ir, estuvimos un largo rato a su alrededor como hipnotizados, viajando en el tiempo y asistiendo a sus batallitas a lo largo del siglo XX. Una tarde mágica!!

Xavi

Introduciendo el fin de semana

Aparece el jueves. Llega el viernes. Y luego el sábado y el domingo y todo se muestra (falsamente) relajado. Pero en una rutina de 6x5, la llegada del fin de semana, o su mera cercanía, no provoca precisamente relajación.

Los planes normalmente no sirven de mucho. Todos sabemos que es mejor no planificar, que los buenos momentos se encuentran. Algo parecido nos han contado en el curso a la hora de crear nuestras películas: hay que estar ahí trabajando, escribiendo, filmando o tomando apuntes para redescubrir la validez de la idea y sus posibilidades de éxito. También nos han dicho que empecemos desde el detalle y lo singular hacia universos más grandes, es decir, de lo particular a lo general; cuando antes siempre había escuchado lo contrario.

Sucede que en las puertas del fin de semana -y con este ya van dos en Buenos Aires- no sé por dónde empezar. Podría tomar una guía y decidir a dónde acudir: teatros, cines, tangos, boliches, pizzerías, parrillas... Acá todo eso se puede hacer... en una noche! Y eso me asusta, porque no encuentro muchas diferencias en el ritmo de esta ciudad con respecto a la que me ha tocado vivir. Salir de noche bien tarde, calentar en algún bar, luego otra copa, tomar un remise (taxi) hasta el boliche (discoteca) seleccionado, terminar en un after desfasado y dejarse llevar hasta que el cuerpo diga off. Todas estas son las posibilidades que nos ofrece Buenos Aires cada finde. Diríase que esas mismas se pueden encontrar en Córdoba, Madrid o Barna. Y eso es lo que me asusta.

Por el momento esto es el principio. Y está bueno.

Juan

Yo no sé

Yo no sé de mucha cosa. No. Lo que sé es que sospecho de algunas. Saber de algo es como abarcar en su totalidad. Prefiero comprender que la totalidad de todo es compleja y profunda y esto hace difícil saber de mucha cosa. Cuanto mas sabemos menos entendemos y menos buscamos . Es una elección . No saber, no de una manera obtusa sino consciente que nadie se encierra en si para siempre. Por eso, Yo no sé.
No sé exactamente el motivo de cada uno de nosotros para estar acá. ¿Por aventura?¿por alguna desilusión amorosa, o no, o por estar en busca de alguna? ¿por el crecimiento profesional o personal?¿por querer ausentarse de algo? Bueno, yo creo que vine aquí no por uno de esos motivos sino por todos ellos y algunos otros más, por eso yo no sé exactamente qué hacer con todo eso. Por ahora tengo idea de las posibilidades.
A pesar de no saber de todos lo poco que pude percibir, creo que, por azar o suerte (como dice Elena), estamos aquí, distintos y armonizando en la medida de lo imposible, y nos está saliendo muy bien todo esto.
Una cosa te digo: elegimos caminar. Esto es cierto, sin duda, no nos equivocamos núnca. ¿Para dónde caminamos?, no sé, pero hasta aquí acertamos.

Laila

ARGENTINA

Transformar en palabras todo lo vivido estas dos semanas tan intensas, es muy complicado;(me he dado cuenta, cuando he tenido que empezar el blog tres veces.)

Aterrizar y ver como una inmensa ciudad de edificios de todas las epocas nos recibe con los brazos abiertos, fue la primera impresión, desde ese instante sabia que todo iba a ir bien. Buenos Aires se presenta como una aventura en la que descubriremos "8 paises", con sus respectivos saludos y costumbres, Chévere!,; a aprender a decir: "no tengo monedas"; a enroscar bien el papel (jajaj); a solucionar "problemas", y observar lo que nos rodea. A amar el blanco y negro, a saber lo que son los ñoquis y el matahambre; a saber que los argentinos inventaron todo (ezte...vizte....); a beber en pingüino, y a no decir "coger"; infinidad de cosas que nunca hubiera imaginado ( y las que quedan por vivir).
Solo pienso en exprimir cada minuto al máximo, porque Argentina engancha!

Lourdes

Decisiones cada día...

Poner el despertador del celular o el del reloj? tomar un baño de agua caliente o fría? falda, vestido o pantalón? el metro, a pie, en carro, taxi o bici? café, jugo de naranja o té?????

Todos los días, de manera inconsciente tomamos millones de decisiones. Las asumimos sin pensarlas, sin saberlas, sin recordarlas. Pero es en el compendio de cada una de esas pequeñeces las que nos une hacia un sin fin de situaciones y momentos.

Hoy siete personas nos encontramos fuera de casa, en un nuevo hogar, compartiendo, estudiando, aprendiendo... pero para llegar acá miles de millones de decisiones fueron ocurriendo, una detrás de otra, sin pensarlo, sin saberlo. Más aún los infinitos sucesos que no pasaron, que no se planificaron, que no pudimos ser parte... el carro accidentado, el despido injustificado, la lluvia, la vida... en fin.

Hoy somos siete... que por el azar, decisiones, energía o Dios (como lo quieras llamar), nos encontramos en Pringles 36... quién sabrá cual es el motivo, la realidad es que acá estamos, acá se escribe nuestra historia entre películas, cigarrillos, mates, con problemas y sin cambio para el omnibús....

Como diría el amigo Rubén: "... decisiones, Ave María, cada día, si señor, alguien pierde, alguien gana, Ave María... decisiones, todo cuesta, salgan y hagan sus apuestas ciudadanía..."

Helen

El PROBLEMA No 1

Desde que llegamos a la Escuela se nos ha venido planteando que es indispensable tener PROBLEMAS para poder hacer documentales.

Como si pensar dedicarse a esta labor no fuera ya un PROBLEMA ahora buscamos por entre las calles, en la sonrisa de la gente, en el interior de cada uno de nosotros y hasta en las hojas de un árbol ¿Dónde está el PROBLEMA?

El PROBLEMA de hoy fue sin duda subir este video, espero que lo puedan ver.

Talía

Cuestión de Monedas

Viernes, 9:42 a. m.

Salgo de casa como cada mañana medio dormido, bien aseado y mal desayunado. La ropa sucia acumulada durante estos primeros días de aventura porteña, me obliga a pasar por la lavandería. Mi siguiente destino es la parada de los aquí llamados "colectivos", es decir, los autobuses. Durante el trayecto, de a penas 5 minutos, meto la mano en el bolsillo y... no hay monedas!!!!!

La ciudad vive sumida en una crisis absoluta de monedas. No es ninguna metáfora para referirme a la pobreza de la que poco a poco se recupera el pueblo argentino, sino que es una realidad literal y palpable a diario en las calles de Buenos Aires. De quien es la culpa? Según mi humilde opinión es de un sistema cuanto menos cuestionable de gestionar el cobro en los "colectivos" bonaerenses. Toda la "plata" redonda de la ciudad se encuentra dentro de estas máquinas...y no son recreativas...

Uno no puede comprar un billete de autobús si no tiene "calderilla" encima, porque dichas máquinas no admiten nada más que monedas. El resultado es que el frutero me debe 10 centavos y la mujer de las fotocopias 30, porque aquí ni Maradona tiene cambio. Lo más gracioso es que a los compañeros subterráneos de los "colectivos" no les va mucho mejor. Cuando bajas las escaleritas para acceder al metro, como que tampoco tienen cambio en monedas, los trabajadores de las taquillas a menudo se ven obligados a abrir las puertas, para que los usuarios, la primera vez un poco incrédulos, pasen sin pagar.

Xavi

Bienvenida

Las aventuras de los indocumentados del documental